Actualmente la degradación de los suelos junto con el cambio climático son temas muy discutidos en la agenda política internacional. En el mundo se ha degradado más de 2 billones de hectáreas anteriormente productivas las cuales son equiparables a la superficie total de Sur América. Por lo tanto, la ganadería que es el principal usuario de los suelos del mundo debe contribuir en la recuperación de los suelos y su productividad, y es en este aspecto donde la actividad ganadera tiene un amplio potencial de lograrlo a través de diferentes prácticas como la implementación de sistemas silvopastoriles manejados bajo pastoreo racional Voisin (PRV), la división eficiente de praderas al reducir su área que permita mayor aprovechamiento de la oferta forrajera, los manejos de ocupación y descanso de las praderas, pueden incrementar la capacidad de carga animal por unidad de área y traducirse en prácticas de ganadería regenerativa que contribuyen a la recuperación de los suelos por su alto aporte a la captura de carbono a través de las heces del ganado.